La obra de Glen Rubsamen investiga acerca de los componentes visuales de un paisaje que él define como “Post-Natural”. Imágenes que simulan a la naturaleza, pero que son algo más.
Las pinturas de Rubsamen son la encarnación visual de la pérdida de una gran idea, pero el artista nos recuerda, sin embargo, que esa pérdida de la Naturaleza no significa el final de la belleza natural. De hecho, y del mismo modo que la polución muestra atardeceres espectaculares, podrían aparecer nuevas e inimaginables formas de lo bello.
Las obras de Rubsamen plantean una actitud completamente novedosa hacia la pintura de paisaje, una actitud que toma muy en cuenta “El F inal de la Naturaleza”, la completa pérdida de cualquier distinción entre lo hecho por el hombre y lo natural. De ese modo sus piezas muestran un mundo en el que la única certeza es que nada de lo que nos rodea puede ser tomado como certero; ni el paso de las estaciones, ni la lluvia o el sol o, ni siquiera, la manipulación genética de la vegetación que se encuentra al otro lado de nuestras ventanas.
Glen Rubsamen (1959) nació en Hollywood, California, si bien vive y trabaja entre Colonia y Nueva York. Es un artista cosmopolita que alimenta su imaginario con sus constantes viajes alrededor de todo el mundo.
Este es un artista en permanente estado de observación de las distintas maneras de ver y traducir el mundo y las complejas variaciones entre lo visto, lo que se ha creído ver y la creación de la imagen que finalmente permanecerá, fiel o no, en la memoria